martes, 24 de abril de 2007

¡Tiemblen, infieles!

Afiche promocional de la campaña "¡Tiemblen, infieles!"

Cuando cae la noche, y las ovejas descarriadas salen a pecar amparándose en la oscuridad de la noche, una figura desafiante se recorta contra el cielo nocturno.

Montado en su motocicleta, siembra el pavor entre las huestes de Satán. ¡Es Él, es el Purísimo! aúllan los pecadores mientras se sumergen en los oscuros callejones. ¡Es el Inmaculado, el Casto, el... ése que está ahí!.

Pronto, la calle se encuentra desierta de nuevo. Como siempre debiera estarlo a tan altas horas de la noche (son las diez).

Él ha vuelto a cumplir. Mañana, las viejecitas podrán volver a ir a misa y depositar su limosna en paz, sin tener que encontrarse con un punk, un travesti, un hippie, un ateo, o alguna otra porquería de esas que tanto miedo dan a las pobres viejecitas.

Ahora, a relajarse unas horas en su harén de monaguillos prepúberes y esperar. Esperar a que vuelva a caer la noche para volver a ser... Ratzinger Z!.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡¡¡Ratzinger Z por favor protégenos!!!

Giani